En nombre del bienestar animal, normalizan la cosificación y mercantilización de lxs prisionerxs en zoológicos, directa e indirectamente bajo pretexto que ahí estarán mejor que en otras cárceles ilegales o que en su mismo hábitat “porque jamás podrán reinsertarse”. Lo que en realidad quieren, es tener lleno el “stock” en los zoológicos/cárceles para el goce de sus visitantes.
En nombre del bienestar animal, normalizan el encierro y refuerzan el pensamiento antropocéntrico, especista, supremacista y autoritario sobre lxs demás animales.
En nombre del bienestar animal, lxs profesionales del encierro (veterinarixs incluídxs que apoyan el encierro) permiten que la zoocosis sea asimilada por lxs prisionerxs de zoológicos. Pastillas, inyecciones y terapias de relajación para conseguirlo. Estxs veterinarixs que apoyan el encierro nos intentan hacer creer que es mejor una vida de encierro que unos supuestos últimos segundos o minutos en libertad antes de ser asesinadxs “porque no se podrán reinsertar jamás”. Esa es la consigna que han venido repitiendo años tras años, para defender el encierro y sentirse sus protectorxs. En lugar de apoyar el encierro, deberían apoyar la liberación mediante proceso de reinsertación. Mientras más tiempo de encierro sea, más difícil será la reinsertación, pero no imposible ya que siempre quedará ese instinto salvaje o lo recuperará al ver y estar con su manada.
Creo que a estas alturas para unx prisionerx es mejor arriesgar su vida en libertad, que consolidar más años de vida sin poder ejercer su autonomía ni sus deseos tras barrotes o vitrinas.
En este video se vé todas las excusas para normalizar y avalar el encierro como única solución. Encima trivializan los intentos de fuga
Lobos de leyenda: el asombroso espectáculo de los bellos lobos marinos
https://invidious . snopyta . org/watch?v=R4lnvAqHmcI
Luego promoverán y normalizarán la domesticación o amansamiento de ciertas especies para exhibirles en los zoológicos/cárceles ya con el nombre cambiado a refugio santuario etc queriendo tener un motivo para perpetuar el encierro, tal como se hacen en algunos zoológicos/cárceles (aunque estos aún lo hacen con fines lucrativos a pesar de su discurso de educación y demás) “para que la población vea que ellxs no son malos, que solo falta darles afecto…” y así “conscientizarles”.
El polémico zoológico argentino que amansa a las fieras
https://invidious . snopyta . org/watch?v=VRwAE6qZF9Q
Zoológico de Luján permite que visitantes toquen a las fieras
https://invidious . snopyta . org/watch?v=PWUYpq9ttZI
Esa esa la jugada que la dominación está haciendo con iniciativas como “Transforma el Zoo”, “Zoo XXI”, etc en el que pretenden normalizar y perpetuar el encierro porque nos hacen creer que hay especies que sí requieren el encierro por su bien.
Copio un artículo que nos habla del proceso de domesticación al zorro que va ligado al proceso de domesticación de nuestra misma especie en manos de opresiones diversas. Es decir la domesticación y el encierro son herramientas que se nos aplica a toda especie animal para quitarnos lo salvajes lo libres.
Domesticados
Últimamente en los medios de comunicación, han aparecido noticias sobre los avances en biología sintética, que apuntan hacia nuevos pasos en la domesticación de la vida, no es ya la chapucera transgenia clásica, sino la reescritura del código genético añadiendo nuevas bases (letras), para crear nuevas proteínas, nuevas oportunidades de negocio y nuevas posibilidades de dominación.
El proceso de domesticación del conjunto animal y vegetal ha sido relativamente rápido, de no más de 10.000 años (dejando aparte el caso precoz del perro) y que se ha ido acelerando al ritmo que marca la aceleración moderna del capital.
Ya históricamente la dominación experimentó una gran expansión con la colonización del “intercambio colombino”, que supuso un paso de especies de un continente a otro y que coincidió en el tiempo con el tráfico de millones de personas africanas reducidas a la esclavitud (domesticados).
Se puede hablar mucho de los efectos de la domesticación, económicos y sociales, del paso de una sociedad de aprovisionamiento, cazadora recolectora, a una sociedad de domesticación… Pero la domesticación es un fenómeno complejo que a menudo, desde la óptica especista y dominadora, se pinta como un acto voluntario de unos animales sociables hacia el hombre, o como el destino de los herbívoros (sin carácter siguiendo la mitología de una prehistoria viril, dominadora y comedora de carne).
Uno de los pocos estudios de larga duración sobre la domesticación es el del científico ruso Dimi-tri Balyaev, en el Instituto de Citología y Genética. Trabajaron sobre un animal jamás domesticado, el zorro plateado (Vulpes vulpes). El experimento comenzó en 1959 y duró hasta el desmoronamiento de la URSS a finales del siglo XX, casi 40 años de esfuerzos domesticadores, en total unas 35 generaciones de zorros.
Se trataba de ir criando zorros, rechazando aquellos que mostraban rechazo a los humanos o un carácter agresivo, y permitiendo reproducirse a los más mansos. Con el paso del tiempo y las generaciones, obtuvieron una variedad de zorro diferente del salvaje sobretodo en su mansedumbre, demostrando que esta tenía una base genética.
Pero estos cambios, ligados al sistema endocrino y neuronal, suponían también cambios morfológicos, patas más cortas, oído menos agudo, pérdida de pigmentación en áreas concretas, orejas caídas, colas enrolladas y cambios en el cráneo. El cambio más notorio en el metabolismo fue la reducción en un 75% de los corticosteroides y el aumento de los niveles de serotonina. Estos zorros modificados por la cría selectiva mostraban, en edad adulta, rasgos de comportamiento infantil.
Al final del experimento, para poder pagar la alimentación de los zorros y el sueldo de los cuidadores, muchos de ellos fueron vendidos como animales de compañía. ¡Triste final de los animales domesticados!
Ahora podríamos imaginarnos como seríamos, nosotros los humanos, si no hubiésemos pasado por milenios de dominación en manos del patriarcado, la religión y la dominación económica, no ya físicamente, sino en nuestro comportamiento y en la aceptación sumisa de nuestros dominadores.
Para hacernos una idea de la energía utilizada en domesticarnos, solo hace falta pensar en el grado de violencia que han necesitado ejercer sobre los adolescentes para atarlos al trabajo y prohibir el sexo hasta una edad avanzada, toda esta violencia tiene un enorme coste económico, pero al patriarcado, a la iglesia, al estado y al capital no les ha dolido pagarlo, ni ahora ni hace miles de años.
Hay animales a los que es muy difícil mantener encerrados en jaulas (y no digamos domarlos) y que en su mayoría mueren durante las primeras fases del cautiverio. Hay testimonios, sobretodo procedentes del genocidio americano, que hablan de comunidades enteras desaparecidas, presas de la melancolía, a los pocos años de estar sometidas a la iglesia y a los conquistadores. Desaparición no atribuible siempre al exterminio físico (aunque no se puede negar la simultaneidad de este, al menos por desnutrición).
Por esto nos parece que vivir salvajes es una aspiración, la única aspiración, consecuente para los oprimidos, pero también que nosotros (tristes zorros de cola enroscada), no podemos ni imaginar como serán nuestros descendientes asilvestrados y cimarrones… La feralización es un camino posible que ya han recorrido en muchos momentos otras especies animales, es una sólida esperanza de un mundo diferente que solo podemos vislumbrar entre nieblas.
*Un video adicional
Familia rusa tiene un cocodrilo del Nilo como mascota
https://invidious . snopyta . org/watch?v=7QVHq3ylkYs
Mascotización/Domesticación/Encierro son opresiones
…y rebelarse, es liberarse…
El proceso de Mascotización/Domesticación/Encierro pueden ser forzoso o pasivo, y está enfocado a erradicar la autonomía ese lado ese instinto salvaje de todx animal, hasta volverle doméstico/mascota. Una mascota más a poseer y decidir por su vida sin preguntarle sin entenderle ni comprenderle, solo guiado por lo que se piensa es mejor para aquellx animal domesticadx o mascotizadx.
Es más fácil pensar que la domesticación/mascotización/encierro es lo mejor que les puede nos puede pasar y para eso lo comparan con las penurias que podrían pasar en otros lugares sin alguien ahí presente para cuidarle/protegerle/alimentarle/…acariciarle y decirle que todo irá bien aunque no nos entienda.
Y es dificil aceptar que su libertad vale más que los más puros deseos proteccionistas.
desobedientes siempre :)